Nada, es un hecho. Cuando llegan los días festivos o los puentes me "encanta" pasarme unos cuantos días en el hospital; ya sea el puente de la Constitución, el día del padre, de la madre, el puente de mayo o el que sea, allí que me voy, me los pillo todos. Pero qué mejor hotel puede haber, habitación, pensión completa, todos los "tratamientos" incluidos, gastos pagados... En fin, un chollo. Es broma, je je.
Ahora en serio. Como mencioné en el anterior post, he estado ingresado 15 días en la Jiménez Díaz (de los cuales he estado 10 en la UCIR) por una infección respiratoria. El susto empezó porque mi corazón se puso a latir como un motor Ferrari (más bien como un Red Bull), se puso a 200 pulsaciones por minuto. Como véis mi corazón es "grande" física y metafóricamente y cuando late lo hace "generosamente". De ahí, al hospital vía ambulancia.
El caso es que estoy perfectamente restablecido y ya en casa desde hace una semana. He vuelto Invictus, como escribí en mi estado en Facebook, con ganas y pilas renovadas hasta que tenga que librar la próxima ofensiva.
Mis mejores armas para luchar en estas situaciones son mi fortaleza, mi optimismo vital y conservar en todo momento el buen humor. He aprendido en símil taurino, a coger el toro por los cuernos y a domeñar el miedo como hacen los toreros con valor, temple y verguënza torera.
Como dijo Freddie Mercury en una canción de su disco Made in Heaven: "It´s a beautiful day, I feel good and nothing is gonna stop me now"(Es un bonito día, me siento bien y nada va a detenerme).
¡Hasta la próxima amigos!
Hola Felix:
ResponderEliminarAnimo ya se ha pasado.
Beso.
Vicente.