jueves, 21 de julio de 2011

El Mundo Amarillo




Si os hablo de El Mundo Amarillo y de Albert Espinosa es posible que no sepáis a qué o a quien me refiero, o sí, si en algún momento habéis optado por leer dicho libro. Pero si os digo que Albert es el autor de Si tú me dices ven, lo dejo todo...pero dime ven, una de las novelas más vendidas en estos momentos, que es director de cine, o que es el guionista de la peli Planta 4ª de Antonio Mercero (basada en su experiencia personal frente al cáncer de joven), seguro que ya le conocéis.



La vida de Albert Espinosa cambió cuando a los 14 años le diagnosticaron un cáncer en una pierna y se la tuvieron que amputar. Como dice él, entre los 14 y los 24 estuvo entrando y saliendo del hospital con relativa frecuencia, y además de una pierna, se dejó también por el camino un pulmón y parte del hígado. Pero el cáncer le cambió para bien, le hizo ser más maduro, crecer como persona, apreciar lo realmente importante en la vida y aprender tantas y tantas cosas, que cualquier otra persona que no pase por una grave enfermedad, necesitaría toda una vida para poder descubrirlas.



El Mundo Amarillo no es el típico libro de autoayuda, de ¿Cómo superar el cáncer? ni nada por el estilo. Son tan sólo las enseñanzas y descubrimientos que extrajo de su lucha contra la enfermedad, y de cómo poder aplicarlos a la vida diaria de cada uno. En la primera parte del libro nos habla de los 23 descubrimientos realizados y en la segunda parte sobre qué son y quienes son los amarillos, concepto muy personal suyo y muy novedoso.


No pretendo hacer una lista de los 23 descubrimientos porque quiero que leáis el libro, pero os hablaré de los que a mí me han parecido mas interesantes:


-"Las pérdidas son positivas". Las pérdidas, tanto físicas como humanas, hay que asumirlas gracias a un necesario proceso de "duelo". Así las asimilarás bien y las convertirás en algo positivo. Perderás algo pero ganarás otras cosas. A Albert su médico le recomendó hacer una "fiesta" de despedida a la pierna que le iban a amputar.


-"No existe la palabra dolor". Hay que aprender cómo es el dolor, a describirlo mejor y a saber que sensaciones te produce. Entonces el dolor no será dolor, será otra cosa.


-"Las energías que aparecen en los 30 minutos son las que solucionan el problema". Cuando tengas que abrir una carta importante, contestar un email urgente o resolver un problema, tómate tu tiempo, al menos 30 minutos, para ordenar tus ideas y pensar bien las cosas. El problema o la noticia serán al menos media hora más viejos.


-"Cuando estás enfermo llevan un control de tu vida, un historial médico. Cuando estás viviendo, deberías llevar otro. Un historial vital". Todos deberíamos ir construyendo un historial de nuestra vida con nuestros buenos recuerdos, con los momentos en los que hemos sido felices, con las cosas que nos gustan y con las que disfrutamos, con retazos como fotografías u objetos que nos evoquen sensaciones. Debemos acudir a él en los momentos malos, tristes o de bajón para sentirnos mejor, y será un excelente material para nuestros seres queridos cuando nosotros ya no estemos en este mundo.


-"No tengas miedo de ser la persona en que te has convertido".



En cuanto al mundo amarillo y a los amarillos utilizaré las propias palabras de Albert para explicarlo:

"Amarillo: Persona especial en nuestra vida a la que abrazamos, acariciamos y con la que dormimos. Marca nuestra vida y no necesita tiempo ni mantenimiento. Las conversaciones con ellos hacen que mejoremos como personas y descubramos nuestras carencias. Son el nuevo eslabón de la amistad".

"Cada persona tiene 23, y son más que amigos. Son personas que te encuentras y que cambian tu vida (a corto o largo plazo)".


El libro nos demuestra que cualquier situación por grave o dramática que sea, puede contarse con humor, ese excelente mecanismo psicológico para afrontar y superar mejor los problemas que tenemos los humanos. He de confesarlo cuando leía El Mundo Amarillo en ocasiones no podía dejar de reírme, porque Albert tiene una gracia y una chispa especial para contar las cosas.


Me emocioné cuando Albert relata que bailó sus últimos bailes, antes de que le amputaran la pierna, con una enfermera al son de Espérame en el Cielo de Machín, o cuando los Pelones (así llamaban a Albert y a sus amigos con cáncer del hospital) salían a tomar el sol. Y me encantó el grito de guerra de éstos, aquel de "No somos cojos, somos cojonudos".



Es un libro que te permite reír, reflexionar, emocionarte... Muy vital, te embarga de optimismo y de ganas de vivir hasta el punto de que te sientes más a gusto contigo mismo y con los que te rodean. En definitiva ser más feliz.




¡Hasta la próxima amigos! y...¡Buen verano a todos!

miércoles, 13 de julio de 2011

Personajes S.XX: Adolfo Suárez.



Hasta ahora en esta sección de Personajes del S.XX he escrito sobre figuras de amplia repercusión internacional, sobre figuras de talla mundial, pero ya tocaba hablar sobre el mejor, a mi juicio, de todo el siglo XX español: Adolfo Suárez.



Pasará a la historia como el gran artífice, junto con el rey, de la Transición española a la democracia, como el líder y la figura clave que en gran medida la hicieron posible. Su sacrificio político y personal, así como su liderazgo en tiempos difíciles fueron clave.



Nació en Cebreros (Ávila) en 1932 y se doctoró en derecho por la Universidad Complutense de Madrid. Su formación se inició en el Movimiento (único partido legal durante la dictadura) y llegó a ocupar numerosos puestos dentro del régimen franquista como los de procurador en Cortes por Ávila, gobernador civil de Segovia, director de RTVE y más tarde Ministro Secretario General del Movimiento. Hombre muy inteligente y de convicciones democráticas, supo darse cuenta de que el régimen franquista no tenía futuro y de que España caminaría inexorablemente hacia una democracia. El rey Don Juan Carlos le nombró presidente del gobierno en junio de 1976 a instancias de Torcuato Fernández Miranda.



Este último, presidente de las Cortes, fue junto con el Rey uno de sus principales valedores y gracias a él se autoliquidaron las Cortes franquistas y se sacó adelante la Ley de Reforma Política, el vital proyecto que desmontaba las estructuras jurídico-políticas en las que se sostenía la dictadura (la tesis del cambio político fue: cambiar de ley a ley, pero dentro de la ley, sin vacíos de poder). El Teniente General Gutiérrez Mellado tuvo la misión de tranquilizar y contener al ejército en la medida de lo posible.



Fue un periodo muy difícil y complicado desde el punto de vista tanto político, social como económico. Un sector inmovilista del anterior régimen denominado "bunker" y opuesto a cualquier tipo de apertura o reforma, un ejército opuesto a las reformas y con veleidades golpistas (p.ej Operación Galaxia), el zarpazo incesante y virulento del terrorismo (ETA, GRAPO y la extrema derecha), o las tensiones autonómicas. Todo ello en el contexto de una grave crisis económica y una fuerte inflación derivada de la crisis del Petróleo del 73, que urgiría a firmar los acuerdos económicos conocidos como los Pactos de la Moncloa.



Los hitos principales y más importantes en el proceso de la Transición democrática en España fueron los siguientes:


-Ley de Reforma Política de 1976.

Como ya he explicado fue el desmontaje de la arquitectura franquista, su voladura controlada y el proyecto vital que permitiría construir un sistema democrático sin ruptura, sin vacío de poder. Fue la única vía posible. Permitió la legalización de los sindicatos, el derecho de huelga, la creación de la UCD o de AP y la legalización p.ej del PSOE.

-Legalización del PCE.

Fue la prueba de fuego, la demostración clara y visible de que la democracia que se quería construir estaría abierta a todas las ideologías y a todas las opciones. Se produjo el 9 de Abril, un sábado santo y por sorpresa, para evitar desórdenes. El PCE renunció a la República y aceptó la Monarquía, además de abogar por la reconciliación.


-Elecciones Generales de junio 1977

Fueron las primeras elecciones democráticas libres en 40 años. Las ganó la UCD (Unión de Centro Democrático) y Suárez se convertía así en el primer presidente de la democracia. Las Cortes surgidas de ellas se convirtieron en Constituyentes para elaborar una Constitución.


-Constitución de 1978

La Carta Magna, la piedra angular en la que se asienta nuestra democracia. Fruto del acuerdo, la negociación y el consenso entre todos los partidos políticos, estableció una democracia parlamentaria, los derechos y libertades fundamentales de los españoles y el actual estado de las Autonomías. Fue aprobada mayoritariamente por los españoles en referéndum el 6 de Diciembre de 1978.


-La cuestión autonómica:

Cataluña: En septiembre del 77 se restableció la Generalitat y se nombraría a Tarradellas presidente de la misma.

País Vasco: Creación del Consejo General Vasco (Enero del 1978). Preautonomía integrada por Álava, Vizcaya y Guipúzcoa.

Galicia: Creación de la Xunta (Marzo del 78).


En 1979 ganó con la UCD sus segundas elecciones, pero ya 1981 la situación de Suárez era muy complicada y su figura se desgastaba. La oposición del PSOE le arrinconaba, las guerras internas y las divisiones en el seno de la UCD se sucedían y para colmo perdió el favor y la sintonía con el Rey. Presentó su dimisión irrevocable.



El gesto que más me impresiona de Suárez fue durante el asalto al Congreso el 23F, cuando era todavía presidente en funciones y se votaba la investidura de Leopoldo Calvo Sotelo. Con una dignidad y una valentía admirable permaneció sentado e impertérrito en su escaño, como también lo hicieron Carillo y Gutiérrez Mellado, cuando las cosas se ponían feas, cuando las balas silbaban por el hemiciclo y los fantasmas del pasado volvían a la memoria de todos. O cuando Suárez desafiando a la muerte se encaró con Tejero ante el trato vejatorio de éste hacia ¡un superior!, el Teniente General Gutiérrez Mellado.



Es de destacar la grandeza y la altura de miras de la clase política en general, tanto de la derecha como de la izquierda, y de los líderes en particular (Suárez, González, Fraga, Carillo o Pujol) de aquel entonces. Todos cedieron en parte de sus pretensiones en favor del conjunto, buscando un común denominador, dando junto al pueblo español una lección ejemplar al mundo de democracia, de entendimiento, de perdón y de reconciliación.



En 1981 el rey le concedió el ducado de Suárez en agradecimiento a su labor y en 1986 fue galardonado con el Premio Príncipe de Asturias de la Concordia.



Ahora que Adolfo Suárez ya no puede recordar a causa del Alzheimer, los españoles debemos recordar por él lo que hizo por España y por la democracia. Se lo merece.



PD: Para entender mejor la figura de Suárez y el contexto general de la Transición es de obligado visionado la serie de tv La Transición, de la periodista Victoria Prego.


¡Hasta la próxima amigos!

martes, 12 de julio de 2011

The Way





The Way es una película sobre el Camino de Santiago, estrenada el año pasado con motivo del año Xacobeo. La he visto últimamente y me gustó, me pareció muy interesante y creo que capta muy bien el espíritu del camino y de sus peregrinos. Está dirigida por el norteamericano Emilio Estévez y protagonizada por su padre Martin Sheen (cuyo nombre real es Ramón Estévez), y es en parte un homenaje a las raíces gallegas de la familia, puesto que el abuelo del primero y padre del segundo fue un gallego que emigró a los EEUU.



Cuenta la historia de Tom Avery, un reputado oftalmólogo que vive en California y que se dedica a jugar al golf en su tiempo libre. Su vida transcurre plácidamente hasta que un día recibe una llamada desde Francia para comunicarle que su hijo Daniel ha muerto. Viaja hasta los Pirineos para repatriar el cuerpo y allí descubre que su hijo estaba iniciando el Camino de Santiago, y es entonces cuando decide hacerlo por él, como tributo hacia él (llevará las cenizas consigo en la mochila).



Nunca se había llevado bien con su hijo, no compartía ni sus inquietudes ni su forma de ver la vida, y no le comprendía, hasta el punto de que se había convertido en un misterio indescifrable para él. Un cierto sentimiento de culpa por no haber tenido una mejor relación con su hijo Daniel en vida, por no haberle escuchado, por no haber disfrutado de él mientras podía, será el verdadero motivo que le impulse a recorrer el camino. Una especie de "redención". Y será gracias al camino como descubra quien era y cómo era realmente su hijo.




Tom en un principio quiere hacer el camino en solitario, y se muestra huraño y desconfiado con el resto de los peregrinos, pero poco a poco sufrirá un cambio personal que le abrirá a los demás y que le permitirá compartir experiencias y vivencias, especialmente gracias a tres peregrinos singulares. Un simpático gordiflón holandés que quiere adelgazar, pero que en el fondo busca que le acepten tal como es; una canadiense con un pasado que le atormenta, que busca aparentemente dejar de fumar; y un escritor irlandés que sufre el bloqueo del escritor, una crisis de inspiración. Los cuatro recorrerán juntos la mayor parte del camino y surgirá una bonita amistad y un gran compañerismo entre ellos.


The Way es una especie de road movie "a pie", que nos muestra el Camino a lo largo de 700 km, desde Roncesvalles hasta Santiago de Compostela e incluso más allá, pues la película termina en la Costa da Morte, en Muxía, donde Tom arroja al mar las cenizas de su hijo. Pasamos por Pamplona, Burgos o León, y gracias a una espléndida fotografía contemplamos maravillosos paisajes de nuestra geografía. La película puede pecar a veces de ingenuidad, como dicen algunas críticas, pero a mi juicio refleja muy bien lo que es el Camino de Santiago, un viaje físico y espiritual (reflexión, compañerismo, compartir, ayudarse unos a otros, etc) además de aportarte una dosis de paz, de sosiego y de "buen rollo" muy necesaria.


El Camino de Santiago como metáfora del camino de la propia vida que todos debemos recorrer, con sus cuestas pronunciadas, sus senderos tortuosos, sus ampollas y sus obstáculos, pero también con sus suaves descensos y sus agradables valles, y plagado de momentos felices y alegrías. Un camino, tanto el real como el metafórico, que merece la pena vivir y recorrer.



"Caminante no hay camino...

se hace camino al andar".



¡Hasta la próxima amigos!



sábado, 2 de julio de 2011

Detrás de la cámara: Clint Eastwood



Hoy quiero hablaros en Detrás de la cámara de Clint Eastwood, otro de los directores de cine que más me gustan (especialmente sus películas de los últimos 20 años). Quiero centrarme en su faceta de director, más allá de la que ha realizado como actor, y hacer un repaso por su filmografía.



Hoy a sus 81 años ya no actúa (su última película como actor fue Gran Torino en 2009), pero sigue dirigiendo sus películas, produciéndolas y creando sus propias bandas sonoras. Mantiene una mente despierta y abierta a su edad, y si en su día interpretó al tipo duro y justiciero, ha sabido tratar como nadie las complejidades del alma humana y los sentimientos del ser humano.



Nació en San Francisco en 1930. En su adolescencia tocó el piano en varios clubs de Los Ángeles y posteriormente trabajó como leñador, gasolinero o instructor de natación para el ejército. A los 20 años empezó a estudiar interpretación en la universidad de Los Ángeles, y no fue hasta los 26 cuando debutó en el cine, gracias a la Universal.



La fama mundial le llegaría de la mano de Sergio Leone y sus "spaguetti western" (ese subgénero tan peculiar y tan distinto del western clásico), interpretando a un pistolero duro, impasible y vengador, ataviado con su célebre poncho. Por un Puñado de Dólares (1964), La Muerte Tenía un Precio (1965) y El Bueno, El Feo y El Malo (1966). Las BSO de Morriconne, magníficas. En los 70 el espaldarazo definitivo vendría con su papel de policía justiciero y violento, con la saga de Harry el sucio.

Harry, El Sucio (1971), Harry, El Fuerte (1973), Harry, El Ejecutor (1976). Luego vendrían Impacto Súbito, dirigida por el propio Eastwood en 1983, y La Lista Negra (1988) a completar la saga.


Pero centrémonos en su faceta como director y en su filmografía como tal. Vereis que va por géneros.


-Western.

El Jinete Pálido (1985).

Sin Perdón (1992).




Con esta película revolucionó el género, que por aquel entonces andaba de capa caída. Es un western crepuscular de impecable factura y guión, en el que se mete en la piel de William Munny, un antiguo forajido que para redimirse ayuda a un grupo de mujeres a librarse de unos matones y del tiránico sheriff local. Como secundarios de lujo, Morgan Freeman y Gene Hackman. Óscar a la mejor película y al mejor director.


-Drama

Un Mundo Perfecto (1993).

Mystic River (2003).

Oscuro drama sobre la venganza y los traumas que dejan en los adultos los abusos sexuales sufridos en la infancia.

Million Dolar Baby (2004).




Clint Eastwood interpreta a Frankie, un viejo entrenador de boxeo, ahora en horas bajas y que regenta un gimnasio de mala muerte. Su vida cambia cuando conoce a Maggie (Hillary Swank), una chica que quiere ser boxeadora. Se convierte en su preparador y su relación irá más allá del ring, será como la de un padre y una hija. Al final, la vida les pone a prueba y Frankie elegirá ayudarla, por encima de sus convicciones morales y religiosas. Oscar al mejor director y a la mejor película.

El Intercambio (2008).


Gran Torino (2009).


Una historia sobre cómo superar los prejuicios raciales y la xenofobia, y que nos enseña a mirar el interior de las personas, más allá de su raza o de su clase social. Muy interesante.

Más allá de la Vida (2010).




Tres historias paralelas sobre la muerte que confluyen al final de la película. Una mujer superviviente de un tsunami, un niño que busca comunicarse con su hermano muerto, y un obrero que tiene el don de establecer contacto con los muertos, con el más allá. Un film un poco duro, pero muy emotivo y profundamente humano.


-Intriga/Suspense

Poder Absoluto (1997).

Un ladrón profesional, durante uno de sus robos, es testigo directo de un crimen cometido por el mismísimo presidente de los EEUU. Acción e intriga en un filme de ritmo trepidante.

Ejecución Inminente (1999).

Un periodista descubre nuevas pruebas que demuestran que un reo es inocente el mismo día de su ejecución. Inicia una carrera contrarreloj para detener la pena capital, e in extremis, lo consigue.

Deuda de Sangre (2002)


-Drama romántico:

-Los Puentes de Madison (1995).

Clint nos demostró que además de un tipo duro, podía ser tierno y romántico. Excelente la interpretación de Merryl Sreep, como siempre.


-Drama histórico.

Invictus (2010).




Ya os hablé de esta gran película. Me remito a lo que escribí sobre ella en el post de Mandela.


-Espionaje.

Firefox (1982).

En la Línea de Fuego (1993).


-Comedia.

Space Cowboys (2000).


-Bélico.

-El Sargento de Hierro (1986).



En Banderas de Nuestros Padres (2006) y Cartas desde Iwo Jima (2006) se plasma la batalla de Iwo Jima, durante la II Guerra Mundial, desde dos perspectivas diferentes, la americana y la japonesa. Por la segunda obtuvo 2 Óscar, al mejor director y a la mejor película en lengua no inglesa (pues está rodada por completo en japonés).



Prácticamente todas sus películas las ha producido con su propia compañía, Malpaso Productions. Como curiosidades sobre Eastwood destacar que ha publicado varios discos de jazz y que ha sido alcalde de la pequeña localidad californiana en la que reside.


En cada una de sus nuevas películas no deja de sorprendernos, y ha alcanzado una maestría narrativa y cinematográfica impresionante detrás de la cámara.




¡Hasta la próxima, amigos!