No Te Rindas

No Te Rindas


Cuando las cosas van mal,

como a veces pasa.

Cuando el camino se ponga cuesta arriba.

Cuando tus recuerdos mengüen y

las dudas suban.

Cuando al querer sonreír

debas ahogar las lágrimas.

Cuando tus preocupaciones te tengan agobiado

descansa, si te urge,

pero no te rindas.

La vida es rara con sus idas y venidas

donde las contradiciones son el pan de cada día.

Y si el fracaso, entonces llama a tu puerta,

y te invita a mirar hacia atrás,

no le des entrada,

lucha, mira hacia delante,

no te rindas.


El triunfo puede estar a la vuelta de la esquina.

El triunfo es el fracaso al revés,

es el matiz plateado de esa nube incierta

que no te deja ver la cercanía...

aunque la tengas ya al alcance de la mano.


Por eso, ¡Decídete a luchar sin tregua,

porque cuando todo empeora,

el que es valiente, no se rinde,

lucha!



Estas líneas y estas palabras tan bellas y tan profundas no son mías. Son de un autor cuyo nombre desconozco pero que no podían faltar en este blog, pues comparten plenamente el espíritu, la esencia y las ideas que inspiran El que resiste...gana.



Son palabras cargadas de fuerza, de coraje, de valentía y de esperanza, y que a mí me encantaron y me emocionaron sinceramente cuando las leí.



Los que me conocéis sabéis que la palabra rendición no va conmigo, que no existe en mi vocabulario. Y si hay que asumir alguna "pequeña" o "gran" rendición, que no sea sin antes luchar con todas las fuerzas, que no sea sin pelear hasta el final. Sólo así se puede tener la plena certeza y la satisfacción interior de que uno no se ha rendido, de que no le han doblegado, de que en definitiva uno ha ganado.



Y por último...Gracias chicos, este blog ha superado las ¡6000! visitas.





¡Hasta la próxima amigos!